¿Qué implica la provisión para impuestos para las empresas (y cómo afecta a los inversores)?

La provisión para impuestos es el importe de dinero estimado que su empresa deberá pagar en concepto de impuestos sobre la renta del año en curso. Asumámoslo: calcular este importe, también conocido como provisión para el impuesto de sociedades, resulta complicado. Además, tiene consecuencias importantes para su empresa.

Aún sabiendo eso, muchas grandes empresas realizan este proceso de manera independiente en su propio departamento fiscal. Dado que esta tarea necesita contribuciones externas al equipo fiscal y que las partes interesadas ajenas a este equipo valoran mucho el resultado obtenido, nos preguntamos lo siguiente: ¿realmente es una buena práctica?

Veamos la importancia de la provisión para impuestos, sobre todo para los inversores, y cómo puede optimizar su proceso de provisión para el impuesto de sociedades.

La importancia de la provisión para impuestos

¿Qué es una provisión para impuestos? El cálculo de la provisión para impuestos consiste en estimar el importe de dinero que una empresa tendrá que pagar en concepto de impuestos sobre la renta del año en curso. Este proceso implica calcular el valor de los activos y pasivos actuales y diferidos.

A simple vista, el cálculo de la provisión para el impuesto de sociedades puede parecer una tarea contable sencilla de la que solo el departamento fiscal se tiene que ocupar. Sin embargo, la declaración de la renta de su empresa no debería importarle solo al departamento fiscal: debería ser un asunto de alta prioridad para todas las partes interesadas,

ya que el gasto total que supone la provisión para el impuesto de sociedades de una empresa no es un importe definitivo. Si le dedica el tiempo adecuado a la planificación fiscal, su empresa puede reducir considerablemente el gasto total de la provisión para el impuesto de sociedades. Aunque una planificación y provisión fiscal adecuada pueden provocar una diferencia notable en el balance de su empresa, el proceso a menudo se encuentra con riesgos a nivel legislativo y con retos operativos.

Los retos de la provisión para impuestos que afrontan las empresas modernas

La provisión para el impuesto de sociedades constituye un punto clave en la planificación de la rentabilidad de una empresa; a pesar de eso, este proceso presenta algunos obstáculos específicos. Veamos algunos de los retos más habituales que se encuentran las empresas que quieren optimizar su provisión para impuestos.

El aumento de la complejidad de la provisión para impuestos

Incluso en la mejor de las circunstancias, la provisión para el impuesto de sociedades es una tarea complicada y no exenta de riesgos. Además, la provisión para impuestos se ha vuelto más compleja en los últimos años. Esto ocurre sobre todo debido al incremento de las normativas de supervisión internacionales, el aumento de la complejidad de las leyes fiscales y las rígidas fechas de presentación de las declaraciones de la renta.

Esto es algo muy habitual en la economía global actual, donde cada vez más empresas intentan competir a nivel internacional. A medida que intentan ampliar sus cadenas de suministro o adquirir competidores extranjeros, las empresas se encuentran con las normativas de más países.

Como resultado, el departamento fiscal ya no puede actuar de forma aislada al resto de la organización. Para que las empresas puedan seguir siendo competitivas y eficaces, deben dar un papel más importante al departamento fiscal. Eso debe incluir el establecimiento de líneas de comunicación entre el director fiscal y el CFO, así como también con el CEO y el resto de los ejecutivos de primer nivel de la compañía.

La conciliación de diferentes enfoques para la creación de informes

La comunicación habitual entre el departamento fiscal, el CFO y la directiva puede ser de gran utilidad. Pero no funcionará a menos que exista un vínculo fundamental entre las partes interesadas de su empresa.

Una empresa ofrece valor a una gran variedad de partes interesadas, incluidos inversores, empleados, clientes, proveedores e incluso la sociedad en general. A veces, puede resultar complicado equilibrar todos esos intereses tan dispares.

En cuanto a la provisión para impuestos, podemos encontrarnos enfoques de la creación de informes diferentes (e incluso opuestos) entre las partes interesadas internas y los inversores. Los inversores suelen ver la provisión para impuestos desde la perspectiva de las ganancias y la idea de la primacía del accionista, mientras que las partes interesadas internas pueden adoptar un punto de vista más orientado a un propósito concreto.

Para encontrar el equilibrio adecuado, los inversores, la junta directiva, el equipo de dirección y los miembros de la comunidad deben definir conjuntamente el objetivo de la empresa y cómo medirán el éxito, más allá de los indicadores financieros tradicionales. Desde el punto de vista de la provisión para impuestos, esto constituye un reto significativo, pero es factible.

El riesgo reputacional

Conseguir el equilibrio entre los intereses no es solo una cuestión de diferencias filosóficas entre las partes interesadas. Si la provisión para el impuesto de sociedades no se realiza correctamente, podría tener lugar una inspección muy dañina a largo plazo para la reputación de su empresa.

En los últimos años, algunas grandes empresas han aparecido en los medios de comunicación por supuestos cargos de evasión fiscal. La evasión fiscal y la elusión fiscal son cosas muy diferentes. Sin embargo, la práctica legal de minimizar la carga impositiva puede resultar nociva para la imagen pública de su empresa cuando se lleva al extremo.

Un gran número de casos que implican a grandes empresas como Amazon, Starbucks o Google han llenado titulares y generado un nuevo debate público sobre la definición de un impuesto de sociedades aceptable.

En resumen, la práctica de una evasión fiscal agresiva puede convertirse en una pesadilla para las relaciones públicas. Las decisiones contables y fiscales de su empresa deben estar alineadas con la imagen y los objetivos corporativos.

Utilizar la herramienta adecuada para el trabajo

Estos retos requieren mucha transparencia y flexibilidad para poder cumplir la legislación fiscal, satisfacer las necesidades de todas las partes interesadas y evitar inspecciones o problemas con la opinión pública. Pero incluso una pequeña confusión durante el período fiscal puede llevar a errores en la declaración financiera, repercusiones en Wall Street y posibles acciones de coerción reglamentaria.

Encontrar la herramienta adecuada para las tareas fiscales es un paso clave para su proceso de declaración de impuestos. Afortunadamente, las mejoras en la automatización y conexión le ayudarán a reducir los retos y riesgos a los que se enfrenta su empresa en el proceso de crear la provisión.

Diseño y creación de su propio software financiero

La mayoría de las empresas todavía confían demasiado en las hojas de Excel para vincular sus informes financieros y fiscales. No obstante, un software fiscal especializado y más moderno le facilitará el tedioso proceso de provisión para impuestos y será el nexo de unión entre el equipo financiero, el fiscal y el resto de las partes interesadas.

Si aún recurre a las hojas de cálculo, quizá ya haya pensando en crear su propia solución para dar soporte a las tareas fiscales. Su empresa puede pensar que ahorrará dinero si crea una solución diseñada para sus necesidades específicas. Sin embargo, el diseño y la creación de un software personalizados necesitan muchos recursos de TI y no eliminan el riesgo de cometer errores de cálculo o normativos.

Soluciones listas para usar

El software listo para usar ofrece varias ventajas sobre las soluciones hechas de manera interna. El software está listo para usarse justo después de su instalación y se puede adaptar a las necesidades de su empresa. El equipo fiscal ahorrará mucho tiempo con la funcionalidad que permite el uso inmediato del software.

Las soluciones fiscales listas para usar también le ayudan a estar constantemente al día de los continuos cambios fiscales y su flexibilidad le permite adaptarse a las necesidades específicas de cada jurisdicción. Además, un software basado en la nube le ayudará a compartir fácilmente la información fiscal con todas las partes interesadas de la compañía y permite que todos los miembros dispongan de los mismos datos.

Normalmente, lo que más preocupa es su coste, pero comprobará que puede conseguir notables beneficios con una inversión relativamente pequeña. El software basado en la nube, que se está convirtiendo rápidamente en el nuevo estándar, tiene una implementación asequible.

Quizás la pregunta más importante sea: ¿Qué precio tendrá que pagar mi empresa si decido seguir trabajando de la manera habitual? Una solución lista para usar actualmente es la opción más efectiva en cuanto a costes y garantiza la menor cantidad de errores a largo plazo.

Elimine los obstáculos de la provisión para impuestos con una gran solución fiscal

El proceso para crear la provisión para el impuesto de sociedades es complejo y puede repercutir positivamente en el balance de su empresa, pero también puede conllevar muchos retos. Los profesionales financieros se enfrentan a muchos obstáculos durante el proceso de creación de la provisión para impuestos, entre ellos, el constante cambio de las leyes fiscales estatales e internacionales, el aumento de inspecciones públicas o privadas y la necesidad de encontrar el equilibrio entre los intereses de los inversores y los de otras partes interesadas.

¿Cómo lograr el equilibrio? Las soluciones modernas de software de gestión fiscal pueden ayudar a su equipo fiscal a eliminar la carga de la recolección y validación de datos, a estar al día de los cambios regulatorios y a mantener informadas a las partes interesadas.

¿Aún no tiene claro si debe crear o comprar una solución fiscal más avanzada?Eche un vistazo a nuestra guía ¿Crear o no crear? para tener más información y decidir si su empresa debe crear o comprar un software para facilitar las tareas fiscales.